ACCIÓN Y DESCRIPCIÓN
Férula de descarga dental cuya función principal es proteger las piezas dentales de la fricción involuntaria ante estados de estrés y/o mientras se duerme.
Indicado para: Bruxismo. Periodos de estrés en los que se produce una fricción involuntaria de los dientes.
MODO DE EMPLEO
La adaptación debe efectuarse en los dientes de la arcada superior.
Pasos a seguir para una correcta personalización de la férula:
1. Calentar agua a 70ºC
2. Retirar el recipiente de la fuente de calor.
3. Sujetar la férula por el saliente con el logo del producto y sumergir la férula completamente en el agua durante 12 segundos (Bruxicalm Day) y 30 segundos (Bruxicalm Night y Bruxicalm Sport).
4. Ensanchar ligeramente las paredes de la férula con el objetivo de no doblar las paredes al introducirla en la boca, tener cuidado de no morder las paredes dobladas. Advertencia: Antes de introducir la férula en la boca, sacudirla para eliminar los restos de agua.
5. Introducir la férula en la boca, cerrar la boca sin apretar los dientes. Con los labios cerrados, inspirar aire para efectuar una succión durante un minuto para conformarlo a la forma de los dientes. Al mismo tiempo presionar con los dedos para que la adaptación sea mejor.
6. Transcurrido un minuto, extraer la férula de la boca e introducirla en agua fría durante al menos 20 minutos. El dispositivo debe mantenerse en la boca por sí mismo. Si esto no ocurre, repita la operación a partir del punto 1.
7. Por último, cortar el saliente con el logo del producto a ras de la férula.
8. En caso de que la férula sea demasiado larga, cortar los extremos con ayuda de las marcas de corte. Si después de la personalización se produjeran rebabas o pliegues del material, eliminarlos utilizando unas tijeras.
Mantenimiento del producto- instrucciones de lavado:
Después de cada uso, lavar la férula frotando con un cepillo de dientes debajo del agua fría.
PRECAUCIONES Y ADVERTENCIAS
Se aconseja utilizar la férula cuando la dentición es permanente.
No lavar la férula en agua caliente.
Se debe consultar con un dentista o médico antes de empezar a usar una férula dental. Sobre todo, en los siguientes casos:
- Bruxismo grave.
- Disfunciones dentales o gingivales. Enfermedad de las encías.
- Problemas respiratorios u otros problemas de salud relacionados con el sueño.
- Dolores y sonidos en la articulación temporomandibular.
- Menores de edad.
No se debe usar la férula en caso de:
- Reparaciones dentales rotas o sueltas, tales como rellenos, coronas o carillas.
- Si hay trastornos de la articulación temporomandibular, también conocido como disfunción temporomandibular, disfunción craneomandibular (DCM).
- Si simultáneamente se usa una prótesis o aparatos dentales (frenos).
- Si hay dientes sueltos.